TELÉPOLIS echeverría

Inteligente ensayo de Echeverría sobre una sociedad futurista anclada en las tecnologías que se avecinaban en el momento de su realización y en los mass-media en la que además se pueden adivinar gran cantidad de hábitos que hoy en día son cotidianos para la mayoría de nosotros.
Crea un mundo tan abstracto que tantas diferentes lecturas darán lugar a tantas diferentes interpretaciones visionarias de una realidad irrealizable. Por momentos parece incluso que se debata sobre el cambio climático...
El consumismo es un tema recurrente a lo largo del escrito, observándose aquí como si se tratara de una práctica residual entre los habitantes de las nuevas polis, cuya organización del espacio público les condiciona sobremanera a la hora de actuar, habiéndose adaptado perfectamente a la nueva realidad virtual. Resulta curioso la manera en la que se estructura y se interrelaciona en Telépolis, definiendo la actuación de las personas como si de tratase de IA.

El texto no está exento de ciertas dosis de humor negro, acentuando así la crítica a personajes, costumbres o sociedades, lo que me ha recordado una película reciente de Bruce Willis titulada "Los Sustitutos" en la que los seres humanos se lanzan a vivir de manera virtual a través de avatares manejados desde sus propias casas, difuminándose así los espacios público-privados de la nueva ciudad.
Una de las cosas que mas aprecio en "Telépolis" y que obvió Rem Koolhaas en "La Ciudad Genérica" es la versatilidad que otorga a los habitantes de las nuevas polis para poder elegir el tipo de vida que quieran, alejados o no de la nueva ciudad mediática y virtual.
Imprescindible.